El mercado de divisas es uno de los ejes fundamentales para las empresas que exportan o importan productos y materias primas

El mercado de divisas es en la actualidad el mercado financiero más grande del mundo. Reconocido como Foreign Exchange es fundamentalmente no organizado y mueve entre US$5 billones y US$7 billones cada día, en una operación de 24 horas los cinco días hábiles de la semana.

Como es un no organizado y no reglado o de carácter privado, no hay un organismo que garantice el estricto cumplimiento de las obligaciones fijadas por las partes y, además, tiene un gran número de centros operativos en el mundo en los que se destacan Nueva York, Singapur, Hong Kong, Londres, Chicago, Toronto, entre otros, donde operan las principales bolsas del mundo.

Debido a que este mercado tiene una alta variedad de actores, desde bancos centrales, empresas privadas e inversionistas particulares, se hace necesario que las compañías que tienen operaciones de comercio exterior cuenten con las herramientas necesarias para gestionar sus divisas, reducir el riesgo del tipo de cambio y garanticen su margen de utilidades.

El peso del mercado de divisas en el comercio internacional

El mercado cambiario no solo tiene la función de fijar los precios de una moneda frente a otra, sino que favorece el intercambio de fondos y, en especial, financia el comercio internacional pues representa una parte importante en las operaciones diarias del mismo.

Es allí donde las empresas que importan o exportan bienes y servicios deben concentrar parte de sus esfuerzos, pues realizar las operaciones con el tipo de cambio objetivo es uno de los principales factores para que las utilidades se mantengan y el riesgo cambiario se disminuya.

Dentro de las opciones para que las compañías se protejan de este riesgo aparecen las Fintech que le apuestan a soluciones financieras dentro del mercado cambiario enfocado en empresas de comercio internacional, ofreciendo la posibilidad de comprar y vender divisas las 24 horas del día los cinco días hábiles de la semana y congelar el tipo de cambio para operaciones futuras.

Estos productos son ofrecidos a empresas pequeñas, medianas y grandes por Mundi, plataforma financiera a través de la cual se pueden realizar intercambio de divisas para empresas y contratos Forward con los que se planifican los flujos de caja, fijando una tasa de cambio objetivo que la compañía busca y que aplicará al momento de realizar sus operaciones o pagos.

Los impactos que genera

La variación en el precio de una divisa frente a otra, como la que se da constantemente entre el dólar estadounidense y el peso mexicano, siendo la primera una moneda G-10 y la segunda una moneda emergente, por lo que la volatilidad  factor fundamental a tener en cuenta por las empresas, pues afecta la capacidad de las empresas para vender mercancías en el exterior o para importarlas.

El tipo de cambio, que se ve afectado por los altos precios del petróleo actuales y una cadena logística global saturada, entre otros factores macroeconómicos, tiene repercusiones en las exportaciones de las empresas, pues la empresa que realiza la compra de los bienes o servicios (importador) debe pagar las facturas en la moneda de la empresa que vende (exportador), lo que significa que debe adquirir esta divisa para cumplir con sus operaciones.

Cuando las compañías tienen esto en cuenta, ya que es una regla general y por defecto, pueden verse expuestas a dos escenarios que pueden aumentar o disminuir la exposición de sus finanzas al riesgo cambiario:

  • Si la moneda del país exportador se devalúa (peso mexicano) frente al país que importa (dólar estadounidense), este segundo ve incrementada su capacidad adquisitiva, viendo una breve reducción en los costos de los bienes o servicios que comprará.
  • Entre tanto, si la moneda del país exportador se revalúa o aprecia frente a la del país importador, este segundo reduce su capacidad de compra, pues debe comprar más divisas para pagar la operación.

En las operaciones de exportación, por ejemplo, el riesgo del tipo de cambio se asume desde el momento en que se realizan o emiten ofertas vinculantes entre las partes o empresas y no necesariamente cuando se generan las facturas.

Para dar por terminado el riesgo cambiario la empresa tendrá que producir el cobro de la operación (exportación) y que el dinero esté en su poder. En estos casos, si las empresas buscan protegerse a través de los contratos Forward a través de Mundi, deberán tener presente que, en la medida de lo posible, estos deberán cubrir desde que se adquieren compromisos u ofertas vinculantes hasta que se obtiene la remuneración, con el fin de mantener los márgenes de utilidades esperados.