Si estás a cargo de una flota y buscas mejorar las condiciones de sus motores, conocer qué es el ralentí y saber cómo reducirlo es un aprendizaje determinante para garantizar la durabilidad de los vehículos de carga a largo plazo.
Dependiendo de los servicios de una empresa, una flota de camiones puede pasar la mayor parte de sus operaciones en tiempo ralentí, lo que puede representar múltiples riesgos para el ciclo de vida del motor y para el flujo de las actividades comerciales.
Con el fin de brindarte una mano en dicho aspecto, en esta nueva nota de Mundi te contaremos qué es el ralentí de un motor, para qué sirve y te enseñaremos cómo reducir el ralentí a través de métodos prácticos y sencillos.
Ralentí de un motor: ¿Qué significa?
El ralentí hace referencia al régimen mínimo de revoluciones por las que el motor de un vehículo puede estar en pleno funcionamiento sin la necesidad de un factor externo, como puede ser un acelerador.
Es decir, un vehículo o un camión de carga se deja en tiempo ralentí cuando se mantiene detenido en un solo lugar, pero el motor permanece encendido.
Algunas situaciones cotidianas describen de una forma más precisa lo que es el ralentí: un instante en un semáforo, al obedecer señales de tránsito, exceso de tráfico, filas aduaneras, etc.
Si algo debes saber sobre este concepto, es que el ralentí durante fragmentos cortos de tiempo no representa ningún tipo de problema para el motor. No obstante, dejar un vehículo en ralentí durante más de 5 minutos puede comenzar a pasar factura, pues de esta forma no solo se estaría desperdiciando combustible, sino que además el motor estaría gastando sus recursos innecesariamente.
¿Cuáles son las consecuencias del ralentí?
A simple vista, parece que el ralentí de un motor no implica grandes consecuencias, pero si tu flota no presta la suficiente atención a esta situación, se pueden desencadenar diferentes fallos mecánicos en los vehículos, lo que implicaría inversión en costos de reparación y retrocesos operativos.
Veamos los principales efectos del ralentí:
Consumo pasivo de combustible
Se estima que un camión pesado en ralentí consume un galón de gasolina por hora y, en situaciones mucho más prolongadas, el ralentí puede representar un aumento de 10 veces su nivel de consumo.
Por lo tanto, el ralentí generará que la flota invierta más recursos económicos en combustibles durante el día, lo que termina afectando la rentabilidad de las operaciones logísticas.
El ralentí contamina el entorno
Cada galón de gasolina quemado produce alrededor de 10 libras de gases de efecto invernadero, por lo que el ralentí prolongado puede comenzar a afectar las condiciones del entorno.
Si un vehículo de carga permanece encendido en ralentí durante más de 5 minutos, comenzará a liberar una mayor cantidad de gases, sustancias químicas y partículas contaminantes. Esto genera un aumento en la bruma de la región, así como afectaciones a las capas atmosféricas.
Reduce el ciclo de vida de un vehículo
Por último, el ralentí es una de las situaciones que más perjudican las condiciones del motor, pues entre más tiempo un vehículo permanezca encendido sin movimiento, mayores serán los recursos que deba consumir para funcionar correctamente.
Muchas personas suelen dejar los camiones en ralentí para calentar su motor. Sin embargo, los expertos recomiendan evitar esta práctica y optar por arrancar el vehículo lentamente.
¿Cómo detectar un ralentí irregular?
La manera más efectiva de identificar si un ralentí presenta problemas, es prestando atención al sonido que emite el motor. Si llevas tiempo conduciendo un vehículo, debes conocer de primera mano cómo suena y cómo se comporta cuando permanece inmóvil en un lugar.
Si el vehículo está quieto e identificas un sonido irregular, lo más recomendable es que acudas inmediatamente al mecánico para revisarlo. Asimismo, si al momento de conducir notas subidas o bajadas de las revoluciones de forma inusual, también puede existir un fallo en eL catalizador, lo que también te obliga a acudir a una revisión mecánica.
Dirígete a tu taller de confianza y revisa el motor de tu vehículo antes de que sufra mayores complicaciones.
¿Cómo evitar el ralentí?
Ahora que conoces qué es el ralentí, queremos finalizar esta nota compartiendo algunas recomendaciones sencillas que pueden mejorar la calidad de los motores de una flota.
- Realiza un mantenimiento constante a los vehículos, de modo que sea posible identificar fallos o problemas antes de cubrir una ruta. Es importante establecer fechas para revisar los motores y asegurarse que todo marche en orden.
- Si se desea calentar un motor, lo peor que puede hacerse es mantener el vehículo detenido. Por lo tanto, recomienda a los agentes logísticos poner en marcha el vehículo para calentar sus sistemas, eso sí, a una velocidad moderada.
- Si te cruzas con un exceso de tráfico, evita estacionar el vehículo a una distancia muy corta del que se encuentra al frente, pues la acumulación de gases y demás puede tener un mayor impacto tanto a los motores como al medio ambiente. Procura dejar un espacio mínimo de 2 metros en una situación de tráfico.
- Sabemos que es complejo, pero haz lo posible por planificar un trayecto que no implique extensas pausas durante el recorrido. Si notas que debes esperar más de lo habitual, lo recomendable es apagar el vehículo.
¡Hemos terminado!
Esperamos que este artículo haya sido una herramienta práctica para conocer qué es el ralentí y por qué debes evitarlo para tu flota de transporte. Te aconsejamos seguir cada una de las recomendaciones para garantizar un mayor ciclo de vida a los motores.
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